tag:blogger.com,1999:blog-71435486719444951002024-02-08T08:14:40.681-03:00Aquí estoy familia biológicaAcerca del trayecto,de los avances, de los retrocesos, tropiezos e impasses en el camino de intentar recuperar el propio origen.Mónica Rodríguezhttp://www.blogger.com/profile/10772782360910916648noreply@blogger.comBlogger30125tag:blogger.com,1999:blog-7143548671944495100.post-9742805762758604082012-09-27T10:10:00.000-03:002015-12-21T23:12:14.009-03:00Ultima entrada de "Aquí estoy familia biológica"Cuando inicié este blog, en octubre de 2009, la expresión “ Aquí estoy familia biológica” surgió como una especie de grito venido desde muy hondo; fue la manera más auténtica y directa que encontré en ese momento de responder a una necesidad muy intensa: buscar y encontrar a mi familia de origen.
Su contenido entero es primordialmente vivencial; el testimonio del recorrido de una búsqueda exterior pero también, lo supe a medida que escribía, hacia el interior de mi misma.
El hecho de escribir en él, me resultó de suma importancia para transitar los ímpetus de búsqueda de ese tiempo contando con un espacio en el cual volcar sentimientos y vivencias, y en varias ocasiones llegar a entenderme a mi misma en las contradicciones interiores que fue generando un camino que en un principio imaginé de una sola mano y con una única salida: el reencuentro con lo perdido.
Sin embargo, el trayecto mismo se fue revelando como no lineal ni de mano única.
Señalo como un hito del camino la posibilidad de reencuentro del año 2011, aquella que llegó hasta las instancias mismas del cotejo de ADN. Porque fue un suceso que implicó un importantísimo darme cuenta.
Darme cuenta de que encontrar mis orígenes y por sobre todo a las personas vinculadas a él, muy probablemente resultaría en un hecho de una enorme complejidad y de muy difícil y trabajosa absorción. Solo pude descubrir esto cuando estuve en las puertas mismas de la posibilidad de encontrar, aún cuando se trataba de gente sumamente amorosa y comprensiva.
Sin llegar a experimentarlo como tal, ya que el resultado del estudio fue negativo, desde la antesala pude ver que la realidad de un reencuentro, moviliza un quantum tal de emociones que no es para menospreciar. Que si se produce, algún eje muy central de nuestra persona se corre y la vida toda se mueve.
Puedo imaginarme, sin embargo, que una vez superado un primer y fuerte impacto, los cimbronazos cesan, todo vuelve a su lugar, y luego la vida se reorganiza y continúa. Como cuando en una ciudad sucede un terremoto.
No deja de ser esta, una vez más, la expresión de una sensación absolutamente subjetiva, que no tiene que ser tomada como una descripción de una vivencia universal. En lo que a mi respecta, fue el punto a partir del cual empecé a pensar que muy probablemente no es una familia lo que quisiera encontrar.
Que mi objetivo se reduce en la actualidad a poder encontrar algún dato, referencia histórica, algo, que me aporte en lo que hace a la inscripción en un linaje, que por supuesto incluye y se completa con todo lo aportado por la familia que me crió.
Por lo demás, he llegado a la conclusión de que cuando, como es mi caso, los padres llevan a cabo la adopción de manera desprolija y por fuera de la legalidad, instalan por fuerza, en ese hijo/a así obtenido, una necesidad que se les volverá insoslayable en algún momento de sus vidas: la de buscar su origen. Y todo porque en ese borrado de las huellas que inevitablemente provoca la maniobra ilegal, transforman en imposible lo que es posible para aquellos adoptados legalmente: saber acerca de sus orígenes.
Y se sabe, el deseo humano se fortalece, multiplica y potencia en la medida que no logra ser alcanzado…
En la actualidad, a punto de cumplirse tres años de la primera incursión en este blog, vislumbro la posibilidad de un pasaje a un espacio distinto, en el que pueda aunar el relato de lo más vivencial y catártico que en muchas ocasiones requiere este tipo de camino, con comentarios de lecturas y reflexiones frente a tantos desafíos presentes y futuros que el tema plantea.
Doy así por finalizado este significativo y entrañable espacio de “Aquí estoy familia biológica” para seguir compartiendo vivencias, experiencias y reflexiones en un nuevo blog que se llamará “Temas de identidad y origen”, en el que comenzaré a escribir a la brevedad.
Millones de gracias a todos/as por leer estas entradas a lo largo del tiempo en que desarrollé este espacio. Nos estamos viendo en el nuevo para seguir intercambiando.
Mónica
Mónica Rodríguezhttp://www.blogger.com/profile/10772782360910916648noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-7143548671944495100.post-9565824362590848332012-09-10T11:50:00.004-03:002022-04-05T17:27:57.484-03:00Un año despuésUn año de impasse. Un largo año de impasse hasta lograr retomar. Lo venía pensando. Lo vengo pensando. Desde hace casi un mes. Me refiero a la posibilidad de dar un cierre a este blog, o quizá, mejor dicho, una continuidad en otro. Por dos razones que considero fundamentales.
En primer lugar, porque el título de este blog ya no refleja mi parámetro conceptual actual.Una búsqueda como la que emprendí en su momento, hace ya varios años atrás, de la cual este blog solo es testimonio del último tramo del camino,es por sobre todo una búsqueda de origen, asunto que va bastante más allá del aspecto biológico. Importa la biología, lo genético y mucho más. Porque lo faltante es la historia que antecede; tanto la del devenir en la cadena generacional, como, y por sobre todo,aquella que desemboca en un deshacerse ¿voluntario/forzoso?por parte de esa madre/padre de su hija/o.
Sería entonces,en parte,una cuestión de nomenclatura.Pero si se tratase tan solo de eso, podría intentar modificar su título y llamarlo " Aquí estoy familia de origen" y ya,seguir adelante.
Sin embargo, después de variadas vueltas del camino,tampoco refleja su título mi sentir.Quizá resulte sincero en exceso,pero siento fuertemente que ya no busco una familia.
Nuevamente,lo que busco es mi origen, en caso que me fuese dado encontrarlo.
Aquella referencia inicial de mi historia.Y probablemente no quiera nada más.
Por eso, este título ya no me encaja.
Aunque debo decir que en lo que va de este tiempo, un año entero que he pasado sin escribir en este blog, no he perdido interés tangencial en muchas cuestiones que tienen que ver con el tema del origen y la identidad, sobre las que si me interesa seguir explorando,leyendo y probablemente también escribiendo.
Todo ello en el marco de que ayer por la noche otra familia se puso en contacto conmigo, ya que cree tener indicios de que puedo ser la hija que su madre debió entregar forzosamente cuando era apenas una adolescente.
Claro que es un suceso enormemente movilizante ( por algo debo estar retomando este blog justo hoy...)aunque, como acabo de contar, no esté buscando una familia, ni tampoco esté activamente movilizando mi búsqueda.
Sin embargo, me encuentro, eso sí, dispuesta e reunirme con la historia que construye el nudo inicial de mi vida. Y a brindar a quien la necesite la vital información de que me encuentro transitando por la vida que me fue dada, en las circunstancias que sea, con ganas,con fuerzas y con alegría y agradecimiento por estar viva.
Por lo demás,me tomo unos días para pensar el nombre de mi nuevo blog, el cual inauguraré en breve.
Los tendré al tanto!
Muchas gracias.
Mónica, tan solo Mónica. Mónica Rodríguezhttp://www.blogger.com/profile/10772782360910916648noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-7143548671944495100.post-69154250484625909692011-09-01T12:10:00.001-03:002022-04-05T17:25:27.017-03:00A modo de impasse¡Hola! ¿Còmo estàn tantos dìas?
Dìas de los difíciles para mì, en los que estuve tratando de absorber el resultado del examen de adn que fue negativo ( lo comentè al pasar, como pude, el mismo dìa que me enterè en el muro del grupo de facebook).
No fue inesperado del todo, ya que había algunos datos que planteaban cierta duda, como la diferencia de factor rh en los grupos sanguíneos. Sin embargo, el hecho de haber llegado hasta la mismìsima situación de extraerme la sangre en laboratorio para la muestra, creo que marca un hito muy importante en lo que a la historia de mi bùsqueda se refiere.
Porque me permitió participar del primer acto de la escena de llegar a encontrar. Experiencia inèdita para mì hasta ese momento, que quizá, nunca vuelva a darse. Ademàs ,muy reveladora en sì misma en cuanto a los sentimientos que me fue generando.
Una gran expectativa y ansiedad, por cierto, pero también, y aunque no suene políticamente correcto,me encontrè frente a una inesperada sensación interior, conforme los días iban pasando, la fecha de la prueba se acercaba y me vì frente a frente con la posibilidad de pertenencia a una familia de varios hermanos, con sus conflictos ,como todas.
La sensación, clara, imposible de desconocer, estaba ahì todo el tiempo: que tal vez a esta altura de mi vida ya no hay lugar para incorporar una otra familia, una relación madre hija màs. ¿Se imaginan lo que puede llegar a ser tener dos madres a falta de una?...um…pido perdón si suena antipático, pero el haberme visto tan de frente a la posibilidad me hizo pensar en la dimensión de complicación real que puede significar el asunto todo: la duplicación, inevitable se me ocurre, de demandas de afecto, de tiempo,de compañía…no sè, creo que depende mucho de la situación en que se encuentre cada quien. ..
En el caso puntual con que me encontrè , la posible madre ( que no fue) es alguien que NO decidió entregar a su hija sino que se la arrebataron prácticamente de los brazos; alguien que deseò desde siempre encontrarla, y por supuesto, como es comprensible, entablar un vìnculo con ella, recuperando asì al menos algo del tiempo perdido.
Lo que puedo decir por mi parte, es que toda esta experiencia, sumamente movilizante, me hace pensar en la necesidad de tomarme un tiempo para pensar y también para decantar.Inclusive para replantearme que es lo que quiero hacer de mi búsqueda.
¿ La quiero seguir? ¿ prefiero parar acà? ¿ estoy preparada para encontrar una madre o una familia en esta etapa de mi vida? ¿ me interesa realmente hacerlo?¿ o será que mi mayor interés, ese que es el único que me sigue quedando en claro que deseo encontrar, es por el saber sobre mis orígenes? De quienes, de dònde vengo… eso sì echo en falta y mucho…
Lo demás no lo sè. Y quisiera pensarlo tranquila y libremente por un tiempo.
Por esa razón puede ser que escriba menos en este blog, o que no lo haga por unos meses.
Si en el interìn de esta impasse, aparece alguien que se sienta de una manera u otra probablemente asociado/a a mis orígenes, puede dejarme un mensaje aquí mismo en el grupo de facebook ( asomarè mis narices cada tanto), o escribirme a bovarymonica@gmail.com.
Soy consciente de que a lo largo de los años tirè varias botellas al mar, y siempre alguna puede llegar a destino…
Intentarè estar abierta a seguir viendo que pasa si me encuentran. Solo que por el momento paro yo de buscar, y probablemente de abocarme tan intensamente al tema.
Muchas gracias de corazòn a todos y todas por el intercambio, por la compañía, por la ayuda. Me despido con un hasta pronto aunque no pueda decirles exactamente hasta cuando.
Mónica Rodríguezhttp://www.blogger.com/profile/10772782360910916648noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7143548671944495100.post-19728605234319545002011-07-29T10:58:00.000-03:002011-07-29T10:59:36.926-03:00Apuntes de la espera22 dìas ya desde mi ùltima entrada.<br />22dìas de enorme revolución interior. Para mì, para ella.<br />Ella, mi probable madre. Alguien frente a quien todavía me mantengo durita. Seguramente como protección por si no es. Porque si es, me voy a desarmar. ¡Còmo me voy a desarmar! Y/o…¿còmo me voy a desarmar? ¿de què manera? ¿ será de alguna que me permita conservar en pie las estructuras mìnimas de mi vida? ¿ o no? ¿ o va a caerse mi mundo entero para volver a empezar?<br />¿De què manera harè yo? ¿de què forma harà ella?¿ còmo, què, haremos ambas ,juntas, para empezar a construir ese vìnculo en el que es tan fundamental el inicio, sin que pueda ya suceder ese inicio?<br />Aunque el adn dè positivo ya no podremos retrotraernos al instante mismo del nacimiento, ni transformarme yo en aquella bebè , ni ella, ella…Ella, en aquella madre quinceañera a quien le fue arrebatada su hija.<br />Entonces, he aquí una gran incógnita: què inventaremos ambas para transitar lo màs saludablemente posible una situación para la cual no existe “jurisprudencia” y si la hay, es muy escasa y reciente.<br />La conocì el 8 de julio por la tarde. En un café.<br />Compartimos fotos, conversamos amigablemente, buscamos coincidencias, parecidos, indicios en cada detalle, en cada gesto; en la forma de hablar, de pensar, de sonreir…<br />Algunos encontramos, o nos pareció hacerlo; porque cuando uno/a se sabe perteneciente a un linaje, esa pertenencia està dada, y muchas veces el parecido no es tan marcado, sin embargo se es. En este caso, con ella, algunos datos aproximaban, otros dejaban ciertas dudas…no se podía asegurar sì, es, somos….<br />Sin embargo el deseo estaba. La tarde corrió, y antes de irnos nos paramos juntas, bien juntas frente al espejo del toilette del bar en la pesquisa de coincidencias.<br />-Tenès la misma sonrisa que mi hermana- dijo ella<br />- Pero tu piel es màs clara- dije yo<br />Y asì, màs cosas. Dichas todas desde el afecto instàntaneo que apareció apenas vernos, desde la expectativa y la esperanza de que sea, ojalà sea.<br />Porque si es, comienza un camino nuevo para ambas.<br />Porque si es, significa que la vida me habrìa dado la invaluable oportunidad de transitar el tramo que me queda conociendo mis orígenes, y muy probablemente, por las circunstancias de la historia, y las características tan llanas, simples y amorosas de la personalidad de ella, la posibilidad de a partir de ahora tener dos madres en lugar de una.<br />Porque si es sentamos juntas, ambas, jurisprudencia a la esperanza, para que otros/as en condiciones similares sigan creyendo que reencontrarse es posible.<br />El estudio de adn se hará el jueves 4 de esta próxima semana, y el resultado estarà en 7 dìas…7 largos y expectantes días…<br />Desde ya que una de las posibilidades es que el resultado sea negativo. Pensè, y hasta lleguè a escribir algunas ideas respecto de què pasa si no es; pero preferí borrarlas. No porque quiera obcecada e irracionalmente apostar al si es, sino que hablar de la posibilidad del no en este momento, serìa intelectualizar demasiado, ya que hoy por hoy, los sentimientos, el anhelo, están del lado del “sì, es”.<br />Si no es, ya veremos, ¿ un duelo? Sì, seguramente algún duelo habrá por ahì…¿cierta pèrdida de la sensación de que es posible encontrar? puede ser,pero después va a pasar, y la esperanza resurge siempre.<br />Por otro lado, ya lo dije, esta experiencia de estar tan a las puertas de la posibilidad de encontrar nunca la tuve; me quedo con eso como algo a favor, por ahora,y esta espera…que es dulce, y es amarga a la vez…Mónica Rodríguezhttp://www.blogger.com/profile/10772782360910916648noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-7143548671944495100.post-91291173689184730422011-07-07T11:09:00.001-03:002015-02-23T10:34:18.579-03:00¿ Què pasa si se encuentra?Eso es lo que me pregunto sin que mi cabeza pueda parar estos últimos días.<br />
Despuès de un largo tiempo sin escribir en este blog, sin haber tenido siquiera la delicadeza de anunciar que me retiraba temporariamente, me veo hoy nuevamente impelida a comunicarme. Otra vez, haciéndolo desde las vísceras, como todas y cada una de las ocasiones en las que escribì aquí, en las que una especie de viento feroz me empujaba a hacerlo y no me dejaba tranquila hasta haber apretado el botoncito que dice publicar.<br />
Allà por abril de este año, cuando dejè de escribir, la vida con sus vicisitudes me había absorbido, y hasta hubo momentos en los que lleguè a pensar , sin detenerme demasiado en el pensamiento, que por ahì ya estaba bien para mi búsqueda, que en una de esas tanto buscar me había servido para sanar por dentro esta pèrdida de mis lazos de origen, y que tal vez, ya no era tan importante encontrar en sì, como el hecho mismo de haber transitado el camino. <br />
Supongo que es por eso que dejè de escribr aquí, pero, bueno es decirlo, pido disculpas por no haber avisado nada y dejarlo asì, colgado…<br />
Digamos entonces que en los últimos tiempos mi” búsqueda” se limitò a entrar cada tanto en facebook a ver si había algún mensaje para mì. Siempre desde esa expectativa interna que conozco tan bien y que solo la experimento respecto de lo que es esta búsqueda: algo que se siente como altamente improbable, prácticamente un milagro ( y tendría un@ encima que creer que pueden suceder!).<br />
Asì fue que aproximadamente un mes atrás, apareció una chica que buscaba a su hermana por la ciudad de La Plata, lugar en el que fui entregada. Tuvimos algunos pocos contactos en los cuales ella me fue contando la difìcil historia de vida de su madre, hasta que ràpidamente nos dimos cuenta de que no era probable el parentesco, ya que la madre, en la nebulosa (de los siempre y para todas) traumáticos recuerdos de la pèrdida de su hija, pudo reconocer que el mes del nacimiento hacìa frìo, quizá en abril, aunque no lo podía precisar.<br />
Digamos que ese breve tiempo de conversación con esta posible hermana que luego no fue, me dejo pensando mucho en lo doloroso de esta historias para las mujeres que de una u otra manera perdieron a sus hijos. Ya sea que fueran entregas màs o menos forzadas concreta o emocionalmente, en todos los casos la consecuencia es una herida de por vida para ellas, imposible de cerrar.<br />
Y ahora…¡ahora! Màs concretamente esta última semana, se cruza en mi vida una mujer. Una madre que busca a su hija a quien tuvo en su adolescencia ,y que, según su relato, le fue poco menos que arrancada de sus brazos para ser entregada al circuito del tràfico de bebès. <br />
Esta mujer, esta madre que porta en su carne esa herida imposible de cerrar, cree ver en mì a su hija. <br />
Ha recorrido el sitio de hijos biológicos que buscan su identidad y encontró en èl mi historia con una foto en la que aparezco, encontrando allì una coincidencia de fecha y de zona, junto con cierto parecido físico.<br />
¿Què decir?<br />
Es un momento vibrante. Porque sería apresurado y poco cauteloso de parte de ambas afirmar que somos madre e hija. Hace falta recorrer ciertos pasos que no podría precisar bien cuales son previamente. Entre ellos un examen de adn.<br />
Pero en lo que necesito concentrarme es en el fenómeno que observo que nos està ocurriendo a ambas desde que nos sacudió la noticia. Digo asì, porque la sensación es la de una especie de terremoto emocional y en mi caso, ademàs identitario. Desde el martes que me enterè, dos días han pasado, y la tierra ¡no deja de moverse debajo de mis pies! <br />
Creo que voy a tener que permitir que esto suceda, aùn a riesgo de saber que existe la posibilidad de que ella no sea mi madre y yo no sea su hija.<br />
Habrá que dejar que esto pase, sencillamente porque es inevitable. No se puede frenar con facilidad la enorme ilusión y expectativa que se genera de resolver al fin el tremendo enigma que atraviesa la vida de cada una de nosotras en su mismísimo centro.<br />
Al fin y al cabo, si nuestras conversaciones nos muestran que los datos no coinciden, o si avanzamos màs y el examen de adn diera negativo, yo siento que, de todas maneras, ambas habremos ganado. Màs allà de cierta desilusión, también inevitable.<br />
Me refiero a que habremos vivido una experiencia que, al menos en mi caso, nunca antes habíamos atravesado: la de llegar hasta las puertas del reencuentro y poder sentir sus emociones ;no es poco. Y lo màs importante, habremos entablado u n vìnculo humano, que siendo como somos ambas partìcipes de un mismo entramado de búsqueda, aùn cuando no se cumpla esa máxima expectativa de haber encontrado una a su madre, la otra a su hija, habremos seguramente hallado una interlocutora màs con quien compartir historia, experiencias, sentires, por eso digo: ¡no es poco!<br />
<br />
Ayer a la mañana hablamos por primera vez por teléfono. A pocos minutos de comenzar a hacerlo, se cortò la luz en casa y la comunicación quedò interumpida. Interferencias dijo después ella,la falta de luz y los obstáculos que rigen nuestras historias no puedo dejar de pensar yo.<br />
Cuando nos volvimos a comunicar, quedamos en vernos este viernes por la tarde en un bar. Para conocernos, llevar fotos, datos, partes del rompecabezas a ver si es que encajan o no las piezas. Y a partir de allì decidir juntas como sigue la historia.<br />
La expectativa es grande, pero anoche pude dormir bien. No asì el martes, estaba demasiado convulsionada. Veremos que pasa. Por supuesto que los tendrè al tanto, porque es importante que compartamos estas historias de búsqueda en sus distintos momentos. Nos ayuda a todos a ser.<br />
¡Muchas gracias!Mónica Rodríguezhttp://www.blogger.com/profile/10772782360910916648noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7143548671944495100.post-91546694796996897312011-04-06T11:15:00.004-03:002015-02-23T10:39:11.390-03:00Una espera-nzaUnos ojos<br />
los mìos <br />
que al mirarte sueñan<br />
viendo màs allà<br />
<br />
<br />
de las tempestades<br />
los infiernos<br />
las fuerzas <br />
cualesquiera<br />
que se ciernen<br />
certeras <br />
sobre tu<br />
frágil<br />
vida<br />
(hojas al viento) <br />
<br />
<br />
son<br />
siniestras figuras<br />
aparecidas <br />
desde atrás<br />
a traiciòn<br />
<br />
<br />
<br />
tinaja de barro<br />
vida<br />
<br />
la tuya<br />
<br />
agua que cae<br />
copiosa<br />
<br />
en su endeblez<br />
en mi ensoñación<br />
imagina<br />
te cuento un cuento<br />
acunante<br />
<br />
sin princesas<br />
<br />
acerca<br />
de una niña<br />
color hojas de otoño<br />
<br />
de sus juegos<br />
de sus cantos<br />
<br />
de aventuras<br />
que desbordan <br />
de la infancia<br />
los umbrales<br />
<br />
<br />
Su transcurrir <br />
Un intento<br />
por ser<br />
<br />
<br />
(Escrito por Mònica- Laura)Mónica Rodríguezhttp://www.blogger.com/profile/10772782360910916648noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7143548671944495100.post-81689166525370792352011-02-17T11:03:00.002-03:002015-02-23T10:39:49.529-03:00Hola a todos y todas!<br />
En estos dìas vean si pueden la peli "mother and child" ( en Argentina amor de madres y està en el cine).<br />
Yo la vì hace pocos dìas, a vuelta de vacaciones y me dejò pensando varias cosas que en estos pròximos dìas espero abrochar en algùn comentario. No soy lic. en crìtica de arte, asì que no esperen algo muy letrado, pero esa madre (Annette Benning)tan dolorosamente añorante de su hija perdida, y ese diario que escribìa, dan para seguir pensando y escribiendo nosotr@s que estamos de este otro lado...<br />
Hasta muy pronto!<br />
Mònica/LauraMónica Rodríguezhttp://www.blogger.com/profile/10772782360910916648noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7143548671944495100.post-33927451999227431712011-01-17T11:52:00.006-03:002015-02-23T10:42:11.111-03:00Hoy es mi cumple......asì que muy simple, cortito y directo: aquì estoy madre,aquì estoy familia de origen, expresando mi deseo, ese que se otorga en el comienzo de un año màs:reencontrarnos, reencontrarnos en algùn punto del camino, rogando, sin dramatismos, que el reencuentro suceda antes de que sea tarde ( es que esta vida es corta,ya cumplo 47, y vos, vos madre, no quiero ni pensar, pero ya tendràs tus añitos).<br />
Y decirles que mientras tanto espero que se produzca el milagro, estoy viviendo la vida que me fue dada de la mejor forma que puedo;no està mal, tengo trabajo, profesiòn, familia, amigas y amigos, intereses, proyectos... fundamentalmente ganas de vivir. <br />
Eso madre, apurate ,decidite, escribime, que el tiempo se pasa, y a esta altura de las cosas,serìa un muy buen momento para el reencuentro: ya estoy grande, madura, no tengo reproches para hacer,me queda claro como es la vida a veces, que uno no siempre elige libremente, y que es importante comprenderse y comprender a los otros,sus aciertos y errores...<br />
Asì que, ¿a què temer? a nada...¿a què seguir esperando? No tiene sentido...<br />
Acordate, 16 0 17 de enero, Ana Marìa Coria, la partera involucrada, ciudad de La Plata, noche lluviosa, aquì estoy madre, aquì estoy familia biològica!<br />
Un cariño agradecido a tod@s: los que me leen, los que tienen la misma historia, y sobre todo ànimos y cariños a los/las que leen y no se atreven todavìa a volverse visibles... madres, padres, hermanos, familiares que andan por ahì, escondidos en las sombras y temen ...<br />
Por favor, confìen...y arreglemos entre tod@s estos desencuentros iniciales de una buena vez...<br />
<br />
19.52 hs del mismo 17 de enero...<br />
<br />
Madre, familia, el dìa pasa y sigo pensando lo mismo, con màs ahinco aùn...<br />
YA ES HORA DEL REENCUENTRO; mi pensamiento respecto del tema NO VA A CAMBIAR.<br />
Quiero, deseo, espero, BUSCO UN REENCUENTRO.<br />
Me resulta muy difìcl pensar que a este altura de la evoluciòn de las comunicaciones, no haya llegado hasta ustedes la notica de mi bùsqueda. Prefiero creer que saber sobre ella saben, pero sucede que no se animan todavìa, y que yo, con mi insistencia voy a lograr que se atrevan.¿Serè demasiado fantasiosa?Mónica Rodríguezhttp://www.blogger.com/profile/10772782360910916648noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7143548671944495100.post-77657899908131720532011-01-03T09:49:00.004-03:002015-02-23T10:43:45.873-03:00Propòsito ( firme ¿eh?) de año nuevo.…cantando al sol como la cigarra <br />
después de un año bajo la tierra<br />
igual que el sobreviviente<br />
que vuelve de la guerra…<br />
<br />
( Como la cigarra,<br />
de M. Elena Walsh)<br />
<br />
…Asì es amigas y amigos, compañeros de ruta, aquí estoy de regreso de batallas varias de la vida, para fraseando a M. Elena, después de un trimestre intenso, difícil, el último del año 2010, en el que permanecì en las trincheras, luchando la vida.<br />
Situaciones de esas, que nos suceden a todos y todas, que por momentos nos acaparan y absorben la atención, el pensamiento, las energìas, el tiempo, el alma toda. La existencia en sì misma con sus situaciones inesperadas o cuando menos no tan esperadas, nuestros estados de ànimo, los momentos y estados de ànimo de aquellos que nos rodean y queremos, nos plantean a veces el desafío de un parate a lo que venia siendo uno de nuestros objetivos primordiales.<br />
En mi caso, como en el de tantos de nosotros, el ”estructurante” objetivo de armar los elementos faltantes de nuestra identidad como sea, aùn cuando lo que se plantee sea la posibilidad de buscar las historias y personas que nos faltan por el resto de nuestras vidas.<br />
Aquí estoy. Para decirles que si bien no escribì entradas en este blog, yo igual estaba. En este lugar y en la otra gran pata de esta pretensión de red grupal que es el grupo que tenemos en facebook “ familias y madres biológicas de hij@s dados en adopciones irregulares” (si todavía no lo viste, visitalo; link a la izquierda) leyéndolos, siguiendo la evolución de cada una de sus búsquedas…<br />
Decirles en este nuevito dìa del 3 de enero de 2011 que vamos a seguir. Que este blog va a seguir aunque haya estado latente durante casi tres meses. Que mi búsqueda y la de tod@s aquell@s que quieran sumarse también va a continuar. Y por sobre todo va a continuar el acicate y estìmulo que ambos espacios intentan ser desde su inicio a la visibilizaciòn, corporizaciòn, aparición prácticamente milagrosa (casi ya a esta altura de los acontecimientos, de búsqueda de tantos y tantas de nosotros) de aquellos seres perdidos en el inicio del camino de nuestras vidas: madres, padres, hermanos, familiares de sangre; en suma, de nuestra LÎNEA DE ORIGEN.<br />
Contarles de paso que en lo personal tengo un buen motivo de intensificación de mis contactos con “el tema” durante este mes, ya que es el mes en que nacì. El mes, porque el dìa, ya se sabe, està en duda…aunque figure el 17 en el documento y haya siempre festejado en ese dìa…<br />
Igual, ayer pensaba, en una de esas los chorizos y patys este año los hago el 16 a la noche que es domingo, un mejor dìa para festejar que un: ¡ l-u-n-e-s! y ya que estamos hago un festejo que cabalga entre dos fechas, no sea cosa que haya celebrado toda mi vida en el dìa equivocado…(de todas maneras, ¿importa tanto eso?)<br />
Por lo demás, amigas y amigos, que no decaiga. Ni el ànimo, ni la búsqueda, ni los intentos, ni la esperanza de que algo bueno respecto de todo el asunto ¡pueda suceder! <br />
Hasta muy pronto. Aguardo todos los comentarios que tengan para hacerme.Mónica Rodríguezhttp://www.blogger.com/profile/10772782360910916648noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7143548671944495100.post-71281477329115579432010-10-09T11:51:00.006-03:002015-02-23T10:46:35.590-03:00¡Aquí!... ¡Aquí estoy familia biológica!...Quisiera no decir esto que voy a decir, pero es lo que siento; tengo la sensación de estar hablándole a una pared. A un extraño muro de lamentos, al que día a día vengo a dejar mi pedido de reencuentro con mis orígenes. Un muro que está completamente despojado de todo contenido místico; es más, parece no tener ninguna intención de ayudarme.<br />
Cada vez que escribo algo en este blog, o alguna nota en el grupo de facebook, lo hago con la esperanza nueva, intacta como si se tratase del primer intento, de recibir alguna respuesta, alguna pista, algún comentario al menos… <br />
Escribo con la esperanza y la necesidad de ser leída, de ser descubierta por aquellos que tendrían que encontrarme en la inmensidad de este océano que nos abarca a todos, internet. Sin embargo, a estas alturas estoy empezando a sentirme como alguien que ha naufragado, y se encuentra perdida en una isla desierta; cada tanto arrojo a los cielos una de mis bengalas, pero es cierto que acumulo una decepción tras otra, porque NO PASA NADA. ¿ Estaré escribiendo para nadie?<br />
Hace unos minutos estaba leyendo el primer post de este blog, que fue escrito hace poco menos de un año, el lunes siguiente a la fecha del día de la madre de 2009. Y hay cosas que me impresionan; por ejemplo, no me acordaba de que en ese momento tenía la misma sensación de urgencia que empiezo a sentir estos días, voy a decirlo: estos complejos, difíciles días previos a la fecha de LA MADRE. ¡Ay! (A veces pienso si no sería mejor que ni existiera semejante festejo…).<br />
El caso es que este lunes pasado escribí ese post al que le puse carta “urgente” a mi madre; entonces lo que me impresiona es la fidelidad, la repetición en la secuencia de los sentimientos que despierta este tema en un@.¡Qué bárbaro realmente!<br />
Me acuerdo también de que cuando inicié este blog, su título emergió, salió, nació a la luz ( valga la metáfora) como una especie de grito ¡ Aquí estoy familia biológica! <br />
¡Aquí!¡Hey, aquí!¡en las profundidades del olvido! ¡ Aquí! ¡en los abismos insondables de las cosas que se tapan y se niegan! ¡Allí es donde estoy familia! ¡ vengan a buscarme!<br />
A veces pienso en cerrar este blog .Por lo que escribía en los primeros párrafos; porque me hace mal toparme con la sensación de que nadie escucha, ya que nadie responde…es más, las primeras líneas de esta nota, llevan implícita esa conspiración interna mía.<br />
Pero tengo que reconocer, y lo compruebo al ver lo que me pasa cuando releo lo que escribí aquí mismo antes, que este blog me ayuda a historizarme.<br />
No voy a dejarlo; son demasiadas las pérdidas contabilizadas en este asunto, y este espacio me da la posibilidad de dejar constancia para mí, para “ell@s”, para otros a los que pueda servirles, de lo que ocurre en mi alma, en mi cuerpo, en mi corazón,en mis pensamientos y sentimientos, frente a esta búsqueda tan difícil, probablemente insoluble ( ¡ojalá que no!) que hace, no al único, pero sí a uno de los núcleos centrales de mi vida.<br />
En resumen, este blog es una especie de diario de viaje hacia un reencuentro deseado, a la vez que difícil, muuuuy difícil de lograr, que me interesa compartir con esos otros y otras que peregrinan detrás de la misma búsqueda.<br />
…¡ Aquí estoy familia biológica! ¡Hey! ¡Aquí…!¡ Aquí estamos! ¡Somos muchos buscando!Mónica Rodríguezhttp://www.blogger.com/profile/10772782360910916648noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7143548671944495100.post-10589944073957797082010-10-04T12:19:00.004-03:002015-02-23T11:48:50.757-03:00Carta urgente a mi madre de origenQuerida madre de origen: <br />
¿Qué mantuvo detenida mi búsqueda esta vez? El cumpleaños de mi marido, que llegó a sus cincuenta. Hicimos una fiesta claro, como corresponde a estos momentos, intentar festejar la vida lo mejor que se pueda.<br />
Bastante gente, más de sesenta personas, un domingo de sol, el jardín lleno de flores recién plantadas y regadas para la ocasión, silloncitos, mesas y manteles distribuidos por sectores, una rica choripaneada y otras cosillas, vino sabroso, una mesa de tortas dulces para chuparse los dedos, y a eso de las cinco de la tarde, un estruendoso canto de feliz cumpleaños resonando en todas las paredes de la casa, para alguien que, humanidad mediante, se merece el cariño, la presencia, la compañía en fin, en un instante de la vida que no deja de tener lo suyo, porque son cincuenta años, con suerte, media vida, es decir, ni más ni menos que el tiempo de vivir que se pasa…<br />
Así es madre, fue un momento intenso, cargado de presencias amigas. No estuviste allí. Tu ausencia forma parte de la larga serie de acontecimientos que no compartimos ni compartiremos, mal que nos pese. Si estaban los padres de él, dos personas grandes ya, con sus achaques pero presentes, y mi madre adoptiva, con sus muchas limitaciones también, pero ahí ( mi padre adoptivo hace años que está postrado en cama). Lo señalo sin reproches, simplemente aludiendo a esta realidad tan fuerte que nos atraviesa, como lo es la de estar indisolublemente unidas por un lazo generado por el hecho de advenir a la vida, pero a la vez aceptar, comprender que esa vida no se compartirá.<br />
Por lo demás, ahora que ya pasó una semana, y voy decantando emociones y acomodando mi cansancio y mis huesos, ya que la corrida de preparativos también fue intensa, quisiera decirte algo que pensé en estos días en relación a “nosotras”.<br />
Es simple: APURATE MADRE Y BUSCAME PORQUE EL TIEMPO DE LA VIDA SE NOS PASA. <br />
Fijate, mi marido ya cumplió cincuenta, Y no deja de sonarme extraño el hecho de que jamás lo viste, no sabes quien es, como piensa, y vaya que es alguien importante en mi vida...<br />
Yo tengo apenas tres años menos que él;también me voy poniendo grande,y no me preocupa tanto por el hecho de que me arrugue, engorde inevitablemente o envejezca ( no te voy a decir que eso no me importa nada…)pero,el hecho de que la vida se me pasa, SE TE PASA...<br />
Sin duda, serás cuando menos, dieciséis, diecisiete años mayor que yo… por favor consideralo. Me interesaría no morirme sin antes conocerte.<br />
Me podés encontrar dando vueltas por acá madre… en este blog, en el grupo de Facebook;tengo expedientes de búsqueda abiertos por todos lados, que La Plata, que la partera Ana María Coria…<br />
Más importante aún, circulo todos los días por las calles de Buenos Aires viviendo la vida, esa misma que, quiero imaginar, vivirás vos. <br />
¿En qué andarás? No me digas que todavía temiendo que salga a la luz nuestra historia…¿cómo explicarte que esa es tan solo una barrera que tenés que animarte a superar? un paso inicial que puede dar lugar a tantas cosas nuevas, buenas…<br />
Dale madre, despertate, reaccioná, escríbime, la nuestra es entre otras cosas, una carrera contra el tiempo…<br />
Quisiera tanto conocerte…<br />
Un abrazo esperanzado<br />
<br />
Mónica ( tal vez, solo tal vez, para vos sea Laura)Mónica Rodríguezhttp://www.blogger.com/profile/10772782360910916648noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7143548671944495100.post-48515211133634012282010-08-11T11:33:00.003-03:002010-08-12T09:18:32.099-03:00"Sindrome de..."Hola tod@s! <br />No me había perdido en el espacio sideral, no. Aquí estoy, en mi vida, como siempre; tratando de recomponerme de un fenómeno que ya me ha pasado otras veces, y sé que es frecuente en nuestro “gremio”, respecto de este aspecto de nuestras vidas: perdí de repente las fuerzas para incluir esta búsqueda y su anhelo como cuestión cotidiana.<br />La cosa fue así: hacia el 24 de julio salí unos días de vacaciones, pocos. Paseé, conocí Entre Ríos, recorrí el parque nacional El Palmar, me desenchufé, me hizo bien, volví. Y ahí fue el asunto, porque a poco de llegar, los primeros días me costaba retomar las cosas en general, así que me dije bueno, paciencia...<br />Pero ya me voy dando cuenta: lo que me está pasando no es la fiaca post días de descanso, sé que se trata del “sindrome”. <br />¿Cómo llamarlo? ¿de abandono? ¿de auto-abandono? No me parece .Y no me parece porque lo poquísimo que conozco de mis momentos iniciales hablan de un pase inmediato desde la panza de mi madre de origen a las manos de la partera-contacto, quien en muy pocas horas lanza la papa caliente (yo) al acogedor regazo de mis desesperados e inconscientes padres, dispuestos a cualquier cosa con tal de acceder a una hija/o.<br />No puede llamarse entonces sindrome de abandono. No. Sencillamente porque mi madre de origen no me abandonó: ella fue una víctima más de una cadena de delitos disfrazados de bondad, como también lo soy yo, como también en algún sentido lo son mis “ falsamente adoptantes” padres. Y no creo tampoco estar siendo presa de un mecanismo de negación al decir esto. <br />De lo que si estoy segura es de que existe un sindrome que por ahora enunciaría así, con puntos suspensivos: “ sindrome de…”,para el que no encuentro rotulación alguna hasta el momento, aunque puedo intentar explicar en qué consiste: es una situación que se da en aquellos que buscan sus orígenes por largo tiempo ( en mi caso algo más de quince años), por la cual, muchas veces a través de ciclos repetitivos, la búsqueda en sí y las fuerzas que ella requiere, se debilitan de manera más o menos transitoria y en mayor o menor envergadura , o bien en forma pasajera, en cuyo caso rápidamente se retoma, o bien se establece a lo largo de un tiempo prolongado, con lo cual las fuerzas se esfuman hasta llegar en algunos casos a desaparecer, sumiendo entonces a nuestra búsqueda en un estado de olvido y abandono que puede transformarse en una actitud permanente.<br />Supongo que es algo que en mayor o menor medida nos va pasando a tod@s los que buscamos, algo con lo que hay que luchar para que no se establezca, dejándonos nuevamente anclados en ese punto inicial de borramiento de nuestro origen, ese instante histórico que nos pertenece y en el cual, de quiénes veníamos, quién nos estaba pariendo,pareció ser un dato no importante.<br />A diferencia de algunos años atrás, al menos a mí esta tendencia de afloje ya me invadió antes,algunas herramientas a nuestro alrededor son de ayuda.<br />Estos espacios de intercambio internaúticos es una de ellas. Este blog, otros sobre el tema, nuestro grupo en Facebook, junto a los muchos otros que existen son lugares donde podemos compartir lo que nos pasa, como nos sentimos con todo esto sin necesidad de acorazarnos durante meses o años; quizá hasta definitivamente.<br />Es más, a veces me pregunto si no sería bueno que estos espacios virtuales sean en realidad puntos iniciales de contacto a partir de los cuales generemos de los otros lazos, los del tiempo real, aquellos que suponen encontrarse para compartir en vivo y en directo. De hecho hay quienes ya lo hacen desde hace tiempo, y resultan en intercambios enriquecedores.<br />Por lo demás, es obvio, pero a decirlo, existe una enorme esperanza y posibilidad implícita en el no cerrar las búsquedas, en el no cerrarse: ella es ENCONTRAR. Alguna vez por fin encontrar. Nuestros orígenes, nuestros padres, hermanos…he ahí nuestra enormísima y gran esperanza respecto de todo este asunto.<br />Por supuesto que me gustaría, es más, les pido que me cuenten como viven ustedes estas cosas, si también padecen de vez en cuando algo parecido a este sindrome ( sé que lleva acento pero me gusta así…) ,que, ¿cómo lo llamarían?<br />Por último, una sola cosa más quisiera contarles: hay muchas cosas respecto de esta búsqueda, en las que no podría dar absoluta fé de mí; por ejemplo, no estoy exenta en absoluto de que de tanto en tanto se apodere de mis fuerzas <br /> “ el sindrome”…es más, como les dije al comienzo, cada tanto me pasa, de ahí que llegué a identificarlo.<br />Tampoco sé si tendré las fuerzas para rescatarme siempre, creo que sí he de intentarlo, porque soy de lucharla…<br />Pero hay algo, una sola cosa de la que estoy absolutamente segura respecto de el asunto completo: jamás se va a apagar en mí la esperanza de encontrar; aunque se me pase toda la vida que me queda esperando que el milagro se produzca. Es más, hasta tengo una imagen que me acompaña, bastante loca por cierto.<br />Me veo a mí misma en mi lecho de muerte (dentro de muuuuchos años…) rodeada de mis seres queridos, en paz eh? En paz con la vida vivida. El caso es que un momento dado, toda arrugada yo, tomada de la mano de una de mis hijas seguramente, pregunto: ¿ alguna novedad sobre mi búsqueda?<br />Y sí…¡hasta el final!<br />¿Acaso no es la nuestra de esas búsquedas que cuando menos merecen desearse, esperarse, realizarse, hasta el final de nuestros días?Mónica Rodríguezhttp://www.blogger.com/profile/10772782360910916648noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-7143548671944495100.post-11177460411659890782010-06-30T23:34:00.003-03:002010-06-30T23:39:43.051-03:00Carta de lectores a ClarínEl lunes 28, el diario Clarín publicó un artículo titulado " Facebook cambió la búsqueda del origen en los hijos adoptivos", el cúal me generó una serie de reflexiones que volqué en esta carta que les comparto, y que pienso enviar también al diario.<br />He aquí la misiva:<br /><br />Su nota del 28 de junio acerca de Facebook y la búsqueda de los hijos adoptivos abre el espacio para poner a la luz una problemática que es necesario visibilizar y acerca de la cual hace falta pedir apoyo a la sociedad toda.<br /> Es más que sabido que en la República Argentina no se llevan a cabo únicamente adopciones legales ( simples o plenas como señala el artículo) . ¿Será acaso una verdad de perogrullo señalar que existen también “de las otras”? ¿cómo llamarlas?¿ ilegales? ¿falsas? . Vacías, podríamos quizá decir, si tenemos en cuenta que carecen de todo marco legal y dato al cual poder acudir a la hora en que las preguntas se despiertan.<br />Las circunstancias de mi propio nacimiento están asociadas a una situación así. Es por eso que escribo esta carta.<br />Sucede que frente a la indiferencia de un estado que no legisla, no responde, no reconoce una problemática que de decidirse a hacerlo seguramente le supondría un importante mea culpa y replanteo profundos, es entonces en este contexto y solo porque es este el contexto, que se acude a Internet como uno, por no decir el único recurso del que disponen hoy por hoy aquellos que buscan sus orígenes en la República Argentina cuyas fechas de nacimiento no corresponden a las de los años de la dictadura y el terrorismo de estado. <br />Como bien dice Mauricio, Internet se transforma entonces en “ La última esperanza” , no tanto porque se agoten los recursos legales, sino porque estos no existen para aquellos que fuimos entregados en estas mal llamadas adopciones.<br />Dado que no existe ningún expediente de adopción en que se encuentren asentados los datos de nuestras familias de origen, lo que muchos hacemos entonces es buscar a través de Internet y sus redes sociales..<br />No es que Facebook cambió la situación de las búsquedas, lo que hizo internet en general fue aportar un espacio donde no lo hay y debería haberlo.<br />¿Y que es lo que debería existir? Cuando menos, como puntapié inicial, un Registro Nacional de personas que buscan su identidad al que pudiéramos acudir para cruzar y verificar datos.<br />Es la necesidad y el pedido en el que coincidimos la mayoría de los que transcurrimos buena parte de nuestras vidas tratando de resolver este enigma. ¿Sería algo tan difícil de hacer?…quien quiera y pueda oir, que oiga…<br />A mis 46 años ( nací en enero de 1964) con varios de ellos llevando a cuestas la realidad de una búsqueda que no termina de abrirse ni esclarecerse hacia ningún lado, mantengo en pie mi deseo profundo de reencuentro con mis orígenes y los familiares que tienen que ver con ellos.<br />Lo digo para desmitificar la idea de que las búsquedas de origen se restringen a las épocas de” rebeldía adolescente”. El momento en que la pregunta se desencadena hacia una búsqueda, depende de un sinnúmero de factores que no se pueden encorsetar en una única etapa evolutiva.<br /> De hecho, en los grupos de Facebook que tienen que ver con el tema, en los blogs, en Internet en general, me cruzo y dialogo todo el tiempo con gente de mi edad, mayor, menor, que vaga como yo tras la búsqueda de los orígenes perdidos.<br />En mi caso particular mi pregunta acerca de quienes fueron mis padres de origen, se desencadenó poco tiempo después del nacimiento de mi primera hija. Probablemente en mi adolescencia estaba demasiado preocupada por no dañar con mi deseo de saber y encontrar a mis padres, quiénes me cuidaron y se hicieron cargo de mí. Les agradezco infinitamente. Por encima y más allá de la torpeza y el inadecuado accionar a través del cual intentaron desde una actitud algo ignorante, algo desesperada también, “conseguir” un hijo. <br />Muchas gracias.Mónica Rodríguezhttp://www.blogger.com/profile/10772782360910916648noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-7143548671944495100.post-49894232981588326222010-06-16T11:12:00.001-03:002010-06-29T08:26:32.365-03:00Nueva carta de Hispana a su hija!!Querida hija: <br /><br /> Finalmente me armé de coraje y estuve en la marcha. Fui de incógnito, con la cara tapada por los anteojos de sol, reconozco que temerosa de cruzarme con alguien que me conociera y me preguntase qué estaba haciendo ahí. Hasta me había armado una excusa para decir en el eventual caso. Igualmente, observé desde la vereda de enfrente. Nada más. <br />No creo que hayas estado. Había muy poca gente y ninguno de esos alrededor de diez rostros que ví se parecían en nada al que imagino que es el tuyo.<br />En la mitad del trayecto me retiré, sin haber formado parte del minúsculo grupo que marchaba. Me fui, en parte porque estaba inquieta, me parecía que todos se daban cuenta de mi situación, estaba convencida de que se leía en mi cara, y además hija, me produjo mucha tristeza ver esa escasez de gente. Si no fuese por historias como la mía…la mía o la nuestra en realidad, situaciones así no pasarían…<br />Podrá parecerte egoísta, pero me alivió la cuasi certeza que tuve de que no estabas ahí presente; confío mucho en la imagen que me hago de tu rostro proyectada en el tiempo, en aquellos rasgos que vieron y grabaron mis ojos esa única vez. Al menos te ahorrabas una nueva sensación de abandono pensé<br />En estos días que siguen, continúa insistente, constante, en mi cabeza, en mi alma, en todo mi ser, la pregunta acerca de cómo sigue esto ahora que recobré el recuerdo de tu existencia. Lo único que sé y tengo claro, es que no quiero ya más volver a negarte hija. Por muy difícil que sea.<br />Todo lo demás es una nebulosa enorme, abigarrada de contenidos diversos, contradictorios, esperanzados a la vez que temerosos. Es que veo dos caminos que se abren ante mí; ambos me asustan y mucho ( reconozco que siempre fui cobarde, ya te habrás dado cuenta…)<br />Un camino es buscarte hija, revolver cielo y tierra hasta lograr deshacer esa ruptura inicial, ¿forzada o voluntaria? no lo sé…será un camino arduo, estoy segura. Lo compruebo todos los días cuando leo los testimonios de hijos que buscan con tantas dificultades; desgarran el alma, te aseguro. ¿Será que este hilo original es tan difícil de recomponer? Y una cosa hija es tener la secreta ilusión de encontrarte sin haber hecho nada, y otra, muy distinta, intentarlo y no poder lograrlo. Esa posibilidad me angustia mucho y me da muchísimo miedo.<br />…Y el otro camino, por el que sí o sí tendría que pasar para llegar al de buscarte es el de hablar con mi familia hija…tu familia también; me refiero a tus hermanas…<br /> De Laura, la mayor ya te hablé. Tiene veinticuatro años, y como te conté lleva el nombre que hubiera deseado ponerte y que no sé si tenés. Lo que no te dije, y hasta a mí me resulta increíble, es que cuando se lo puse, NO ME ACORDABA de que era el que había pensado para vos, porque además en ese momento de mi vida, recordaba muy débilmente tu mismo nacimiento…así de crudas fueron las cosas.Te ruego tengas presente las letanías de perdón que te ofrecí en otra carta como escudo protector de tus sentimientos y de tu corazón cuando leas estas cosas que no puedo callar, si es que quiero darme a conocer realmente frente a vos. <br />Tu otra hermana, Camila, veintiún años, dulce, muy callada, observadora…con ellas, y con mi marido que no es tu padre, sí el de ellas, tendría…tendré que hablar…<br />Amada hija confío en que este diálogo que entablo con vos me va a animar a hacer aquello que sea necesario más allá de mis temores, de mis debilidades, de mis cobardías…<br /> A medida que te escribo estas cartas, más real y corpórea se vuelve tu figura, y se aclara en mí la fundamental idea de que en algún lado en este mundo estás, que no te diluiste en el aire, que hubo seres que te quisieron y te cuidaron; ¿ cuál habrá sido tu destino?<br />Hija: no puedo prometerte ahora voy a hacer tal o cual cosa, por ejemplo: la próxima vez que te escriba será para contarte que hablé con mi familia… estoy a una enorme distancia de coraje todavía; pero tené la absoluta certeza de que estoy comprometida a fondo en este esfuerzo por recuperarte. <br />De la misma manera que atravesé largos años en una total amnesia, hoy por hoy mi pensarte es casi obsesivo, y la mayor parte de mi actividad mental consiste en buscar el modo de dilucidar esta, nuestra situación. Contá con eso de la misma manera que lo hago yo, sé que esta vez las cosas serán distintas, deseo, confío, confiemos juntas en que serán mejores.<br />Te quiero hija, te escribiré muy pronto.<br /> <br /> Hispana ( tu madre).<br /><br /><br />Nota: Recuerden que Hispana es un personaje de ficciónMónica Rodríguezhttp://www.blogger.com/profile/10772782360910916648noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7143548671944495100.post-46401942734124483772010-06-09T10:29:00.001-03:002010-06-09T10:35:02.971-03:00El después de la marcha del 8-6¿Qué nos queda en este después de la marcha de ayer?<br />Probablemente una sensación ambigua. <br />Claro está, la alegría de saber que este tema de la búsqueda de identidad que es el nuestro, y la necesidad de aval y legislación de parte del estado, comience a circular más allá de nosotr@s, los propios interesados, y encuentre eco en la sociedad toda.<br />A la vez, este primer movimiento más masivo que se intentó generar, puso en evidencia ciertos puntos débiles que deberíamos afrontar:<br />Que las agrupaciones que desde hace algunos años iniciaron su trabajo en la lucha por la verdadera identidad de origen, vienen trabajando en forma disgregada, a partir de desacuerdos que fueron generando diferentes divisiones.<br />Prueba de ello resulta la escasa convocatoria de la marcha de ayer, aspecto que puede tener que ver en parte con un estadío de toma de conciencia social que se encuentra en sus inicios, pero es probable que haya influido también la modalidad poco abierta de la convocatoria ( hasta último momento no se sabía qué se iba a presentar ni hacer durante la marcha) que haya hecho que quienes buscan su identidad de origen no se hayan sentido suficientemente informados y representados por las organizaciones convocantes.<br />Y me refiero sobre todo a lo que ha sido la organización y desarrollo de la marcha en Buenos Aires, que como señalé en anterior nota, tuvo la característica distintiva de llevarse a cabo en horario distinto que las del resto de las provincias en que se realizó también.<br />A partir de lo sucedido surge la pregunta entiendo que necesaria de parte de las instituciones convocantes: la de si resultan en la actualidad adecuada y suficientemente representativas del colectivo social de los que buscan su identidad.<br />Ya que sería importante evitar esos males institucionales que vuelven inoperantes muchas veces a las organizaciones de grupo: el aislamiento y ruptura de los vasos comunicantes con el colectivo humano concreto que representan, y el inminente riesgo que eso significa de pérdida del motivo convocante inicial, como así también esos pequeños narcisismos de grupo que suelen armarse, donde cada quien piensa que es el que representa mejor, y donde circula ese humano impulso de apoderamiento de los logros que tan nocivo resulta a la hora de que los objetivos sean grupales y verdaderamente representativos .<br />Todos estos aspectos llevan a pensar que el después de la marcha requiere de una reflexión de parte de tod@s nosotr@s. Desde nuestro lugar personal frente al tema, pero principalmente y sobre todo, desde las instituciones que han asumido algún propósito de representación de nuestra problemática. <br />Ya que si hay algo a lo que parece estar convocándonos esta post-marcha es a un mayor diálogo en las diferencias, para representar con mayor fuerza la necesidad que llevó a congregarse allá en su inicio.Mónica Rodríguezhttp://www.blogger.com/profile/10772782360910916648noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7143548671944495100.post-8614496522102227552010-05-26T10:15:00.006-03:002010-05-29T10:01:35.781-03:00Nuestra próxima marcha por la identidad del 8 & los festejos del bicentenario.Ayer estuve en los festejos del bicentenario de nuestro país.<br />Participé del momento en que se proyectaban imágenes de estos doscientos años de historia sobre la fachada del cabildo en medio del apretuje popular. Fue una experiencia muy emocionante, no solo por la síntesis histórica que se veía, sino, y sobre todo, por la sensación de fraternidad que se palpaba entre la gente, el reforzamiento de la identidad nacional que se sentía en el ambiente, y la convivencia pacífica en la diversidad de adhesiones que fue muy interesante de comprobar in situ. Según que personaje o momento histórico se mostraba en pantalla, entre la multitud estaban los que aplaudían, los que silbaban, o se mantenían en silencio de acuerdo al nivel de adhesión o rechazo que les despertaban...un fenómeno digno de observar y compartir...<br />Dado que la multitud era cosa seria, regresamos a casa,y seguimos los festejos por televisión. Más allá de lo que veía, no podía evitar preguntarme todo el tiempo porque TANTA gente allí. Claro que la respuesta escapa a mi posibilidad de análisis;supongo que existirán importantísimas fundamentaciones sociológicas y políticas que puedan explicar la expresión popular que se observó.<br />Pienso insistentemente en dos cosas que no puedo evitar asociar a nuestra próxima marcha: <br />- Creo que la gente concurrió a los festejos, entre otros motivos, desde una necesidad de contención y alivio a apremiantes necesidades y carencias actuales, de manera tal de quedar tod@s abarcados en un mismo marco superador: el ser argentino, la identidad nacional.<br />- Creo que fue muy importante para la participación, la cuestión de que en“casi" todos los casos, es algo que veremos una sola vez en nuestra vida, es decir, se trataba de un asunto que nos enfrenta de una u otra manera a nuestra finitud como seres humanos.<br />¿Y qué tiene que ver esto con nuestra marcha?...supongo que bastante, ya que nosotr@s, los que buscamos nuestro origen, somos ciudadan@s que tenemos una necesidad social a la cual el estado y sus sucesivos gobiernos tienen una enorme dificultad de escuchar: la necesidad de que se organice, reglamente, legisle y brinde espacio de algún tipo a nuestra problemática. <br />Por eso la marcha.<br />Por lo demás, intentamos evolucionar desde nuestro lugar de apropiados, expropiados, víctimas, sobrevivientes, hacia otro de constructores- participantes de esta realidad que nos toca (ver últimas traducciones de Patri), y en ese sentido la marcha puede ayudarnos y mucho, a dar un paso en dirección al armado de un conjunto en lo que hace a una búsqueda que nos es común.<br />Quiero decir: hacer algo, y junt@s, por este aspecto de nuestras vidas.<br />En cuanto a la finitud...nuestras vidas tienen un tiempo limitado. Para todo. Incluso para resolver el proceso interior y exterior de nuestra búsqueda.<br />Y eso es algo que por momentos puede experimentarse como sumamente angustiante, ya que nos enfrenta a la posibilidad de que una parte fundamental de nuestra existencia pueda llegar a quedar inconclusa si es que no tenemos la posibilidad de hallar a nuestras familias de origen.<br />De ahí que sea tan importante que nos juntemos de todas las maneras que se nos ocurran: grupos virtuales, reales, marchas, lo que sea...<br />Es que tenemos la necesidad de ayudarnos entre tod@s a mitigar, al menos en algo, esta ausencia con la que circulamos por la vida.Mónica Rodríguezhttp://www.blogger.com/profile/10772782360910916648noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-7143548671944495100.post-71002715907786027322010-05-17T13:41:00.003-03:002010-05-17T23:50:01.596-03:00Hispana a su hija (cuarta carta).Querida hija: <br /> <br /> Es de mañana, alrededor de las diez. Estoy en camisón todavía, deambulando por la casa, sin lograr arrancar con las cosas del día. Debería vestirme y salir cuanto antes; sin embargo, no puedo. Una y otra vez retorna a mi mente la misma pregunta: ¿Qué sigue hija? ¿qué sigue ahora? ¿Cómo continuar después de vencer la gran barrera de mi “amnesia”, y luego de haber enunciado para vos las interminables letanías de mi pedido de perdón?<br /> Necesito cuando menos no digo ordenar mis ideas, es imposible eso en esta etapa de mi vida según veo, pero quisiera al menos tomarme ese momento de imaginarme que te hablo y me escuchas, me recibís, me entendés. .. <br /> Además, anoche dormí muy mal hija, entrecortado, sobrellevando la noche entera un sueño que por momentos me parecía real, y no sé, tengo esa sensación fea de querer seguir durmiendo el día entero, y a la vez, durante la noche había momentos en los que quería escaparme del sueño, despertar y salir corriendo. <br /> Me veía caminando por la vereda de una calle ancha, una especie de avenida. Yo andaba despacio; llevaba una bolsa muy grande y pesada, mis ropas se veían algo viejas, desgreñadas, y por alguna razón, no sé cual, me había quedado sin casa. <br />Como no podía levantar esa especie de enorme bolsa de consorcio negra que supongo que portaría mis pertenencias, la llevaba a la rastra prácticamente; tenía una sensación de mucho cansancio, tanto que en un momento dado me acomodaba en un recoveco de una vidriera y me iba quedando dormida. <br /> De repente, a lo lejos, comienzo a sentir una especie de murmullo, primero lejano, después más nítido cada vez; levanto la mirada y veo avanzar por el pavimento una columna de personas que vienen caminando en una especie de marcha. Entonces yo me acerco al cordón, tratando de despabilarme. Algo más cerca, veo que esas personas, de edades diferentes, portan cada una un cartel, un rectángulo de cartón que llevan colgado con una cinta. Este cartón se apoya sobre su pecho, y entrecerrando mis ojos alcanzo a ver, no a leer nítidamente, que cada uno tiene un nombre, casi todos dicen: doctor, o partera, y una fecha de nacimiento.<br />En ese momento, dentro mismo del sueño, siento que mi corazón da un vuelco; suelto mi bolsa, la dejo tirada ahí, junto al cordón, porque tengo un instante de claridad, luminosa y radiante que me hace dar cuenta de que ahí, entre medio de esa gente puede ser que estés vos.<br /> Empiezo entonces a moverme entre la multitud: primero lentamente, luego a medida que la masa avanza y llega a su final, lo hago cada vez más rápido. Al principio solamente miro, después directamente los paro uno por uno, a todos los que puedo con un movimiento en seco para leer mejor los datos, pero ninguno coincide con los tuyos; a la par que les pregunto cada vez más desesperadamente ¿dónde naciste? ¿dónde naciste? Pero me doy cuenta de que algo pasa. No sé si es que la gente me ignora, o me rechazan por mi aspecto, o que no me ven directamente, como si yo fuera invisible.<br />Al final hija, la escena toma un tinte bastante dramático: mis movimientos se van tornando cada vez más rápidos, al punto tal que termino girando sobre mi misma y muy mareada, a punto de caerme casi, agarrándome con una mano del cordón de la vereda viendo a la multitud alejarse y con una extrañísima sensación de real invisibilidad y de mucha tristeza por haber perdido la posibilidad de encontrarte.<br />Por suerte, no fue más que un sueño hija. Más precisamente una pesadilla, y confío en que la vida me ayudará a que no sea una realidad.<br />Porque la realidad hija, la más inmediata y la más importante que hace a nosotras, es que anoche leí que sí va a haber una marcha; una marcha de la vida real de la gente que busca sus orígenes, y tal vez el sueño haya ocurrido por esa noticia que leí.<br />Porque más allá de que esa cantidad de gente quiera movilizarse para lograr leyes y respuesta del estado a su situación, cosa que comprendo y te imaginarás que apoyo,<br />¿sabés que me imaginé yo, justo antes de dormirme? Lo que se veía en el sueño: que la gente caminaba en la marcha con un cartel con sus datos de nacimiento, y que tal vez yo podría concurrir para intentar encontrarte. Es cierto también que mi pensamiento no quedó en una mera linda ensoñación, y que me enredé pensando en que pasaría si te encuentro con el resto de mi vida, con las personas que me rodean.<br />Porque mis hijas no saben de tu existencia hija. Porque mi esposo no lo toma en cuenta como algo real de mi historia. Lo hablamos una sola vez cuando éramos novios, y es un tema que nunca más se tocó. Y es también una pesada carga que arrastro en mi vida, como esa bolsa llena de piedras de mi sueño, con la que no sé que hacer, ni dónde poner.<br />Sin embargo quiero que sepas que no por eso dejo de planteármelo, de preguntármelo, últimamente cada vez más, y sé que si he de en algún momento decidirme a buscarte, tengo primero que resolver este punto.<br />Porque además me voy dando cuenta de que no tengo derecho a condenarte a una invisibilidad eterna en mi vida ¿no? Inclusive no sé si no debería hablar de esto con mi familia, aún cuando nunca te encontrara ( tampoco puedo imaginar que eso pase).<br />Claro está que también tengo el temor de que prefieras que yo permanezca invisible, pero bueno, habrá que enfrentarlo, darle chances al menos a que la realidad se manifieste. <br />Creo que prefiero asumir ese riesgo a seguir soñando o imaginando nada más.<br />Por aquí ando hija mía, luchando por dejar salir de mí los sentimientos que siempre estuvieron.<br />Acordate de hacerte un enorme cartel con tus datos para la marcha del 8. Yo también debería llevar uno, creo. <br />Lo principal ahora es trabajar conmigo misma y con mis miedos para atreverme a ir, para mantenerme abierta a tu existencia, frente a lo que ha sido el secreto por siempre guardado, el que nadie a mi alrededor conoce.<br />Te mando todo el cariño que me va emergiendo, que es mucho.<br /><br /> Hispana, tu madre.<br />Nota: Recuerden que Hispana es un personaje de ficción, como así también las cartas que escribe.<br />Si lees y tenés un momento, podés dejar tu comentario. Gracias.Mónica Rodríguezhttp://www.blogger.com/profile/10772782360910916648noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7143548671944495100.post-48356543458334760432010-04-14T12:18:00.001-03:002010-04-19T10:36:59.083-03:00Seis meses de blog...Faltan pocos días para que se cumplan seis meses de la existencia de este blog.<br />Seis meses que no han pasado en vano.<br />Seis meses productivos respecto del “ rollo de mi búsqueda”, como a veces me nombro el asunto a mí misma, en el intento por desdramatizar y tomármelo un poco en solfa.<br />¿Productivos por qué? Por varias razones que paso a contarles.<br />Porque gracias a este espacio, aún con altibajos, me mantuve escribiendo sobre este tema difícil de digerir a menos que se encuentre una manera de estar constantemente haciendo algo con él; y gracias a haberlo hecho en el blog, no fue un mero soliloquio catártico, sino que se transformó en una vía de encuentro con otros y otras que produjo efectos reales y concretos.<br />¿Cuáles?<br />Cuándo en la entrada del 26 de noviembre de 2009, les anunciaba que había creado un grupo en Facebook para familiares y madres de origen, una especie de gesto desesperado, comenté ese día, al no saber ya dónde ni cómo buscar a mi familia biológica, creo que no imaginé que a lo largo de los meses, ese grupo iba a tener un desarrollo tan constante.<br /> Ya que si bien no posee una existencia rimbombante, ni aspira a tenerla, cada uno de los hasta hoy 201 miembros que circulamos por allí, sabemos que CONTAMOS CON ESE ESPACIO, que ahí nos expresamos, nos transmitimos nuestras historias y nuestros momentos de búsqueda, pero que no lo hacemos únicamente como una cuestión catártica ni para sentarnos a esperar que se produzca” el milagro de Internet” y nuestras familias aparezcan. No.<br />Aunque nunca nos lo dijimos explícitamente, tod@s los que participamos sabemos que estamos allí para TRABAJAR ACTIVAMENTE. Para proponer ideas, caminos posibles a través de los cuales buscar junt@s que nuestras madres y familias de origen se animen a romper ese silencio tan difícil de quebrar en el que posiblemente han estado sumidos la mayor parte de sus vidas.<br />De ahí que puede vérsenos, exprimiéndonos en conjunto las neuronas, proponiéndonos un@s a otr@s distintos foros con temas nuevos (listado de parteras, s.o.s a nuestras madres de origen en el día de nuestros cumpleaños, y tantos más que irán ocurriéndosenos), alentándonos con palabras solidarias cuando algún espíritu decae, todo eso en un marco de acompañamiento mutuo que cuando menos nos hace bien, y cuando más:¡aspiramos a generar reencuentros! <br />Y luego está la cuestión de las cartas. Propósito de año nuevo del que hablaba en la entrada del 6 de enero: comenzar a escribir una serie de cartas, poniéndome en la piel de una supuesta madre de origen, ficticia ella, segundo gesto de desesperación de mi parte, casi dos meses después de la creación del grupo en Facebook sin que apareciese (todavía) ninguna madre.<br /> A falta de una madre de las reales que se manifieste decía en esa fecha,¡ me voy a inventar una!¡ Y voy a hacerlo ya ¡ Y lo hice.<br />Y sucedió algo maravilloso: las leyó una ¡verdadera! madre de origen. Una mujer de Bogotá, Mónica, que habiendo leído la primera carta escribió un comentario en el que mencionaba su gran resonancia interior con los sentimientos de esta madre ( la ficticia) que había entregado una hija en adopción como ella.<br />Así que espero, pido, que la incorporación de este gran valor como es Mónica a nuestras vidas, y las otras que puedan darse a conocer en el futuro, me libere de cualquier culpa y cargo por algún eventual malestar que pueda haberse generado en alguno de los varios confundidos que interpretaron que era una madre real la que escribía ( igual, nadie se quejó)…<br />Porque, de verdad, si esas cartas, producen como resultado que mujeres que han entregado hijos en la vida real se sientan identificadas con ellas y animadas a expresarse a partir de leerlas, ¡Bienvenidas sean todas las confusiones que puedan generarnos!<br />De todas maneras esos sucesivos episodios de confusión fueron realmente conmovedores, y debo decirlo, el impacto que me produjeron me inhibió por un tiempo a continuar el proyecto de escritura de las cartas de una madre ficticia. No quisiera seguir haciéndolo, sin antes recordarles y aclararlo una vez más: la madre de mis cartas no existe en la vida real, es un personaje inventado por mi cabeza, en el intento de entender qué mecanismos, qué dolores, qué sentimientos atraviesan el corazón y la mente de nuestras madres de origen.<br />Por lo demás, ahora contamos con Mónica, un ser profundo, sensible, con mucho para compartirnos, con quién podemos ayudarnos mutuamente. Y están también los otr@s, esos madres y padres que por el momento se asoman a lo que compartimos, leen lo que escribimos, sin animarse todavía a hablar .Ya lo harán…<br />.En la espera confiada de este paso de parte de ell@s de la invisibilidad a la visibilidad, sigamos junt@s trabajando, conteniéndonos, aportándonos ideas, ayudándonos en fin con el “rollo” de nuestras búsquedas.<br /> Gracias por leer y participar si lo desean con sus comentarios o bien haciéndose miembros del grupo en facebook.<br />Estoy feliz de compartir seis meses de vida de este blog con tod@s ustedes.<br /> <br /> Mónica/ LauraMónica Rodríguezhttp://www.blogger.com/profile/10772782360910916648noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7143548671944495100.post-14330914251289454122010-03-17T16:23:00.007-03:002010-04-30T09:07:05.294-03:00Tercera carta de una madreQuerida hija:<br /><br /> Vuelvo a escribirte. Espero no molestarte con mi insistencia en estas cartas que en realidad guardo en un cajón por el momento, hasta algún día en que tal vez el coraje se adueñe de mí y pueda hacer algo con ellas.<br /> Te escribo porque desde que recuperé tu recuerdo, necesito contarte las cosas de cada día, ya que ahora el tiempo se mide de acuerdo a tu ausencia.<br />Es esta una etapa en la que todo lo que siempre hice en la vida, me refiero a las cosas cotidianas, están adquiriendo un sentido nuevo, y eso tiene mucho que ver con tu persona. Con el haber recobrado la conciencia de que en algún lado estás aunque no sea acá conmigo.<br />Por ejemplo, yo antes no le encontraba demasiado sentido a internet, ni siquiera navegaba; a lo sumo una mirada que echaba cada tanto a los mails, cuando me acordaba; ahora en cambio me pasan las horas poniendo: hijos buscan madre biológica, búsqueda de orígenes, busco madre perdida y un montón de frases por el estilo que se me van ocurriendo en el momento.<br /> Es que siento la necesidad imperiosa hija, no digo de buscarte, porque a tanto no me atrevo, pero sí de estar en contacto de alguna manera con esta historia que por algún lado nos une. Y noto, que desde ese momento, hace poco más de un mes, en que no sé cómo, desperté de mi amnesia, empiezo poco a poco a desarrollar una vida paralela en mi interior que te incluye de manera exclusiva, de la que nadie a mi alrededor sabe.<br />Por el momento, se trata de un asunto muy mío, muy personal, que solamente canalizo en los hechos a través de estas búsquedas en internet que además me han posibilitado conocer toda otra serie de personas que se encuentran en situaciones similares a la mía, o mejor dicho a la tuya. Porque he visto que hay una enorme cantidad de hijos e hijas entregados en adopciones ilegales, como en tu caso, que tratan de encontrar sus orígenes, y sobre todo hija, algo de lo que no tenía yo la menor idea, quieren saber qué ha sido de esa mujer que los trajo al mundo, añoran conocerla, aún cuando muchos son ya grandes y ha pasado mucho tiempo de esas historias. Es toda una novedad para mí, y algo que no termino de entender bien…<br />Como te decía, sacando estas incursiones en las que por el momento tampoco me comunico, sino que solamente observo, este es un tema del que no hablo con nadie.<br />Hace unos días, Laura, mi hija mayor, me cargaba: “ Otra vez en la compu mami, a ver si te volvés ciber adicta” y cosas así; es siempre muy chispita y alegre ella.<br />Entre la charla y sus chistes, me insistió para que me arme una carpeta en Facebook <br />“así chateás” me decía. Por supuesto que yo no entendía nada al principio de qué me hablaba ni para qué se usaba, hasta que me explicó y armó uno. ” Se dice cuenta mamá, no carpeta, de dónde sacaste carpeta?” <br />Y ahí, mientras estábamos sentadas las dos frente a la computadora, me dí cuenta de repente de que ella no es mi hija mayor, que Laura es mi segunda hija, y que lleva el nombre que yo hubiera deseado que tengas y que no sé si te pusieron… <br />Descubrí que hay un grupo en este Facebook hija. Uno en el que se congregan familiares que buscan hijos e hijas entregados en adopción. La mayoría son hijos, algunos hermanos, o primos.<br />Me imaginé, mientras leía sus historias, qué pasaría si algún día tus hermanas se enteran.¿ Te buscarían ellas? ¿Querrían saber qué fue de vos, cómo todos esos que aparecen ahí? ¿me animaría yo alguna vez a contarles?<br />Y encontré allí también comentarios de otras madres, que como yo, han perdido el rastro de los hijos que han dado. Resultó tan extraño, porque hasta ese instante jamás se me había ocurrido pensar que existen otras mujeres en mi misma circunstancia.<br />Es que hay tantas cosas que a mí jamás se me hubiera ocurrido pensar…<br />El caso es que yo creía que era la única mujer en este mundo que había tomado una decisión como la que tomé…y no…ahora sé que hay al menos una madre más en este mundo que ha atravesado por las mismas circunstancias que yo. <br />Lo sé porque leí en ese grupo los llamados que ella le hace a su hija, y si bien hay diferencias de países y de edades, sus sentimientos …y esa afirmación sostenida a rajatabla de que ella tiene presente a su hija cada día de su vida… exactamente lo que me está pasando a mí, desde que tuve esa imagen reflejo tuya de la que te hablé en mi primera carta.<br />Por lo demás hija, estoy intentando ubicarme a favor de mí misma; no me serviría tirarme abajo. Entonces, en mis momentos de autoreproche, me digo que mi amnesia y mi aparente falta de recuerdos a lo largo de tantos años, no es sino uno de los modos en que se ha manifestado en mí el dolor de tu pérdida.<br /> Y que a partir de ahora, podré hacer otras cosas con esta historia que nos une.<br />Es más, me urge hacer algo aunque no sepa bien qué. Más allá de cuánto me cuesta atreverme; temo tantas cosas…<br />Prometo pensarlo mucho querida hija.<br /> Hasta aquí llega hoy mi pensamiento y mi corazón.<br /><br />Te dejo todos mis cariños juntos<br /><br /> Hispana, tu madre.Mónica Rodríguezhttp://www.blogger.com/profile/10772782360910916648noreply@blogger.com6tag:blogger.com,1999:blog-7143548671944495100.post-90224156882946549492010-02-26T11:18:00.001-03:002010-02-26T11:22:04.117-03:00Hay momentos en los que este blog me pincha...Hay momentos en los que este blog me pincha, me pincha el alma.<br />Me duele, me muerde casi. Y aunque es cierto que logro convivir mejor conmigo misma cuando puedoo expresar lo que siento o me pasa en palabras escritas, el asunto es el tema, el motivo inicial que me impulsó a escribirlo.<br />Creo que, si pudiera elegir, preferiría que mi irregular adopción, y su interminable repercusión a lo largo del entero desarrollo de mi vida, no existiera. Si pudiera elegir, desearía que no tuviera yo ese inevitable tiempo que invertir en este algo siempre informe que necesita constantemente drenarse.<br />Y eso que no puedo decir que esta historia me haya llevado a cometer grandes desastres con mi vida. Entiendo que el conflicto principal que me aqueja no pasa por ahí. Ya que mi personalidad no tiende a actuadora, sino más bien a reflexiva, lo cual me ha ayudado mucho a cuidarme muy bien de no repetir vivencias, la de abandono por caso. <br />Al contrario, mi vida consiste, en una medida importante, en un intento constante de reversión de ese aspecto, gracias a lo cual acumulo sinnúmero de experiencias vitales de cuidar a y de ser cuidada por los otros. <br />Más bien me parece que el problema que experimento por estos días es una cuestión en el área de mis sentimientos; que hace que no pueda llevarme bien últimamente con esta historia y, a consecuencia de ello, con la escritura de este blog.<br />Es por eso que digo, sostengo, reitero: últimamente este blog me pincha. Lo digo en el sentido de punzante, y también, de cierto desinfle.<br />Porque cuando me siento frente a la máquina y comienzo a escribir, si o si entro en contacto con esas sensaciones bien profundas de ausencia, de agujero, de pérdida, de vacío… <br />Uso diversas palabras porque no encuentro una única y sola que defina ese desasosiego que me inunda por momentos, esa sensación de una relación vital, visceral, absolutamente elemental, que no fue, que no se dio, y que ni siquiera tengo en claro que sea justo llamar abandono.<br /> Y luego, por fuera del vaivén de los sentimientos, está el contexto.<br /> La vida con sus dificultades que nunca faltan, y más últimamente, ese malestar que subyace a nuestra condición de adoptados ilegalmente que por momentos se manifiesta en atisbos de discusiones que se arman en la web entre algunos de los participantes de los distintos grupos de Facebook, blogs, etc que tienen como objetivo abordar de alguna manera nuestro problema en común.<br />Así sucede que termina transformándose en una situación de enfrentamiento, algo que en realidad es un padecimiento compartido por tod@s, en el que tod@s sufrimos y hacemos con ese malestar lo que podemos.<br />Los años que llevo de búsqueda, no digo infructuosa, pero si de no haber llegado todavía al meollo de los datos sobre mi origen, me han llevado a pensar que no existe una sola forma de buscar.<br />Que es fundamental correrse de visiones mesiánicas que nos hagan ilusionar, aunque sea por un instante, con la idea de que existe una manera única, o mejor, y que si la seguimos encontraremos y de lo contrario no.<br />Que lo que hacemos son búsquedas, variadas, diferentes tipos de intentos, que seguimos caminos muchas veces distintos en los que podemos acompañarnos y alentarnos a seguir cuando flaqueamos, porque el trayecto es arduo, muy arduo.<br />Que incluso una misma persona, pasa por distintas etapas en su búsqueda. <br />Que los tiempos internos no son siempre iguales, y que por tanto, si un@ siente que no es momento para algo, por más que ayudase a la búsqueda, no se está perdiendo un tren que no va a pasar nunca más, porque la vida siempre nos da oportunidades. <br />Y porque es importante reconocer que estas búsquedas de origen, también nos dan miedo y a veces uno se traba un tiempo. Ya se podrá seguir adelante… <br />Ojalá que entre tod@s podamos acompañarnos, sin autoritarismos, con respeto por las diferencias individuales y la diversidad de elecciones. Que podamos aceptar el hecho de que cada un@ hace lo que puede, en el momento que puede.<br />Y ojalá también que este blog ¡deje de pincharme!Mónica Rodríguezhttp://www.blogger.com/profile/10772782360910916648noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-7143548671944495100.post-7410541547031711032010-02-18T12:17:00.001-03:002010-03-22T11:05:09.589-03:00Una madre escribe su segunda cartaPor muchas cosas que haga, que trabaje, intente tener ideas, proyectos ajenos a ellas, es innegable que son mis hijas el motor que impulsa mi vida. Quizá los demás no lo notan. Pero yo sé que es así. Frente a mi misma sé que es así.<br />Basta que surja la voz de alguna de ellas venida del fondo de su dormitorio, que aún inmersa como me encuentre en mis propias actividades o urgencias cotidianas, ahí voy yo, de inmediato, dispuesta desde el fondo de mi ser a ayudarlas. Me brota, como si fuera un gesto surgido de mi naturaleza; justamente yo, que nunca creí en esa cuestión de la maternidad como algo venido de las vísceras de una.<br />Es probable que mis palabras puedan resultarte hirientes, como un acto de alarde de mi parte, de los cuidados y la atención que te fueron negados; no es mi intención hija.<br />¿Cuál es mi intención al escribirte entonces? Creo que no lo sé todavía.<br /> Hoy por hoy, obedezco más bien a un impulso, sí, el que surgió en mí de recontactarte a partir del momento en que te ví, como dibujada, en la pared descascarada del contrafrente ¿recordás?<br />Supongo que me propongo darte al menos la oportunidad,a través de estas cartas, de conocerme. Que sepas de las contradicciones de las que estoy hecha. Esta, una de tantas: ¿Cómo puede ser que a mis cincuenta y pico sea así, con esas dos hijas ya grandes, una a punto de terminar su carrera y la otra que ya va por el tercer año de facultad?<br /> Yo, que respecto de tu nacimiento me comporté como una especie de monstruo sin alma, desoyendo, si es que la hay, si es que existe, la voz de la sangre, y hasta la de la compasión humana más elemental.¿Cómo puede ser?<br />No lo sé; desde aquí parada como estoy, en el momento actual de mi vida, no lo entiendo. Por eso tampoco espero que puedas vos entenderlo, ni perdonarme.<br />Tal vez podría intentar balbucear explicaciones posibles: era chica, no tenía apoyo, me sentía sola, me pareció imposible de abarcar lo que se venía…¿qué decir?<br /> Sin embargo no resultan argumentos suficientes que justifiquen la decisión que tomé. Porque haya sido como haya sido, aún al borde del precipicio en el que me encontraba, yo la tomé.<br />Sólo me queda una cosa por hacer hija, además de continuar escribiéndote así, cartas en el aire, una cosa que me surge como necesidad urgente. Y es PEDIRTE PERDON. PERDON. PERDON. <br />Perdón por dejarte <br />por arriesgarte a manos desconocidas.<br />por no animarme a enfrentar la vida que venía a tu lado.<br />Perdón.<br />Por tratar de salvar mi pellejo<br />por haberme negado a crecer de golpe<br />por sembrar en tu vida el sentimiento de abandono<br />Perdón, sobre todo, por todos estos años que seguí viviendo como si no existieras,<br />Como si nunca hubieras nacido, como si no me importara nada…<br />Perdón. Perdón. Infinitamente te pido perdón.<br />¿Podrás? ¿Sabrás alguna vez perdonarme hija?<br />Se viene a mi mente la historia de La Magdalena ¿la conocés?<br /> Un relato que conservo muy vivo de las clases de religión de la escuela a la que asistía.<br />Ella era una pecadora, y se enteró de algo así como una fiesta o una cena a la que iba a acudir Jesús, así que tomó los aceites, perfumes y ungüentos que utilizaba en su tarea de prostituta imagino, y allá fue, dispuesta a conseguir su perdón. Su atención. Su reconocimiento.<br />Cuenta el relato bíblico que llegó frente a él, se arrodilló a sus pies y comenzó a ungirlos con los elementos que había llevado. Se los masajeó, cubriendo sus pies de besos, y hasta se los secó con sus largos cabellos.<br />Será que todo eso puede hacer el ansia de redención hija.<br />Creo que hoy soy yo La Magdalena. Y estoy a tus pies, para pedirte perdón. Aún sabiendo que no tengo derecho adquirido como para pedirte nada.<br />Sabé cuando menos de mi arrepentimiento, de mi enorme, inacabable mientras dure mi existencia arrepentimiento. <br />Hasta pronto hija,<br /> Hispana ( Tu madre sin derecho a firmar como tal)Mónica Rodríguezhttp://www.blogger.com/profile/10772782360910916648noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-7143548671944495100.post-8555165932630288612010-02-03T09:20:00.002-03:002010-02-03T10:22:34.867-03:00Esa rara especie de los adoptados irregularesBuen día, a pesar de la lluviosa mañana...interesante, se presta a reflexionar...<br />Ya se sabe,somos muchos, muchísimos los que buscamos nuestros orígenes en nuestra Argentina. Se sabe y se ve, se palpa en la web por caso: blogs, notas, grupos de facebook, de todo tipo...<br />Para muestra,el grupo que armé hace un tiempo en facebook, fundamentalmente destinado a familiares que han entregado niños/as, bebés en adopción en algún momento de sus vidas,abunda y sobreabunda, como no podría ser de otra manera,de gente que busca sus orígenes... <br />Y sí...¿ y qué les vamos a decir? "Acá no es", "Grupo equivocado"? ¡No!...al contrario;les decimos: "¡Bienvenidos!".A este, a ese, y a cualquier otro espacio en el que sientan que encuentran, que encontramos, cabida. Que ya bastante excluídos estamos de nuestra familia original... <br />Y así,tomándole un poco el pulso a los comentarios que van llegando al grupo,se me ocurre, con perdón de la expresión,que somos una especie de bicho de dos clases.Habemos aquellos que carecemos de datos fehacientes que nos aporten pistas desde las cuales buscar, y andamos ahí, por momentos sufrientes, por momentos esperanzados, arrastrando nuestros pies por la web, por la vida, por las búsquedas, y habemos otros; los que poseemos datos concretos: nombres y apellidos, partidas de nacimiento, lugar donde se produjo, etc, y que a pesar de eso, tenemos trabas, interiores, para poder enterarnos de que es así.<br />Generalmente esas trabas tienen que ver con miedos: a qué pase con quienes nos adoptaron si tirampos del hilo que desenmarañaría nuestro carretel, qué podríamos llegar a encontrar, tantas cosas...<br />Tal vez por eso, por todo eso,necesitamos armar juntos una red de contención que nos permita ejercer, unos para con otros, la función de ayudarnos a despejar estos miedos. ¿ Cómo? aportándonos la información veraz, esa que va más allá de los prejuicios de que puede pasar si hacemos tal o cual cosa... y además, y por sobre todo, apoyarnos afectivamente. Animándonos a la búsqueda, si es que deseamos hacerla, dando por descontado que son muchos y muy grandes los sentimientos que se nos van a movilizar al hacerlo, la estantería emocional entera!!<br />Tratemos de pasar un buen día...bienvenida la lluvia, como bienvenida la vida que nos tocó...Mónica Rodríguezhttp://www.blogger.com/profile/10772782360910916648noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7143548671944495100.post-34857875902687183032010-01-13T09:27:00.001-03:002010-03-22T10:51:11.382-03:00Primera carta de una madreA mi hija: <br /> <br />Es extraño escribirte. Y es la primera vez que me animo a hacerlo. Ayudada tal vez por el hecho de saber que lo más probable por el momento es que no leas esta carta. <br />Sos mi hija perdida; mi hija perdida y en algún sentido últimamente recobrada. Recobrada para mis adentros.<br />Sucedió a partir de que estuve varios meses con ataques de pánico, lo supe después, unas sensaciones de asfixia y falta de aire al punto de cerrárseme la garganta que me obligaron a consultar a un psiquiatra, el que me medicó, y sugirió que escribiera sobre mis angustiasy sobre las cosas que él notaba que me costaba tanto hablar, ya que la mayor parte de la entrevista permanecía callada.<br />Le hice caso , y lo que nunca en mi vida, comencé a escribir un diario íntimo, un diario que página a página me recordó lo que tenía hasta olvidado: tu existencia hija…<br />¿ Cómo se puede? Te preguntarás…yo tampoco lo entiendo…<br />Dos meses escribiendo, cada mañana. Le tomé el gusto; me levantaba más temprano especialmente para hacerlo. <br />Al principio surgían temas triviales, cotidianos, hasta aquel día, en el que el nudo en la garganta era de tal magnitud que tuve que pararme de la mesa y abrir la ventana de par en par para tomar el aire… y fue ese el preciso momento en que te vi.<br /> Como si estuvieras dibujada, en la pared descascarada del contrafrente del edificio en que vivo. Ahí estabas: tu carita morada de recién nacida, algo arrugada, y los oscurísimos ojos que sobresalían en esa cabecita pequeña con una suave, escasa y oscura pelusa desordenada apuntando a direcciones diversas por cabello.<br />Y tu cuerpecito, largo, delgado, contorsionándose en espasmos de llanto. Igual, exactamente igual que aquel único y brevísimo instante en que te vi pasar en brazos de la partera. <br />Ahí fue cuando recordé hija…¿ cómo pude olvidar, borrar arrancar así de mi vida una historia tan…¿ cruda? ¿cruel? No sé. No sabría cómo llamarla…<br />Fue como recobrar repentinamente la memoria, después de atravesar un prolongado período de amnesia; desde ese momento, mis síntomas cedieron, y se deshizo de inmediato ese horrible nudo de garganta que sentí tanto tiempo.<br />También estoy recobrando lentamente la capacidad de pensar, aunque no es fácil porque los pensamientos muchas veces son tortuosos; siento culpa, mucha culpa. Y me da una gran vergüenza lo que hice, como actué. <br />Aunque supongo que es mejor que funcionar como una máquina sin alma, que es lo que fui todos estos años. <br />¿Qué más decirte hija? Por el momento que sepas que existo. Que pude dejar de negar frente a mí misma tu propia existencia. Sé que es muy poco, que suena cruel, que es cruel, pero no sé, algo en mí lo ve como una especie de punto de partida. ¿ Estaré muy loca?<br />Es que creo que si puedo recuperar, al menos en mi conciencia, este vínculo con vos que arranqué de mi vida…tal vez no todo esté perdido…tal vez no esté yo perdida por completo…tal vez se pueda reparar en algo el daño ocasionado…<br />Gracias por existir hija.<br /> Hispana (No me atrevo a firmar madre)<br /><br /><br />.Mónica Rodríguezhttp://www.blogger.com/profile/10772782360910916648noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-7143548671944495100.post-18640631937880192422010-01-06T12:34:00.000-03:002010-01-06T12:37:18.402-03:00Propósito de año nuevoNo pude escribir en diciembre. Me refiero a algo nuevo que saliera de mí. Y creo que no se debió al trajín práctico y a ese cierto grado de stress que producen las fiestas. No fue eso.<br />Fue que no quise repetirme a mi misma. Me aburría la idea de reiterarme.<br />Cuando por fin me decidí a escribir este blog, después de rumiarlo mentalmente mucho tiempo, me impulsó a concretar la movilización interna que todos los años me produce la fecha del día de la madre: decir algo de eso que tanto quema por dentro. Y ahí fue que comencé. Enhorabuena. Octubre de 2009.<br />Por supuesto que una nueva revolución interna se desató cercana a la fecha de navidad y fin de año. Pero qué decir de ella sin que se transforme en una queja reiterada y aburrida para mi y para los demás. <br /> Fue así, dando vueltas, que estos últimos días releí unas cartas que algunos años atrás había comenzado a escribirle a mi madre de origen. Y recordé que al tiempo de haber escrito unas cuantas de éstas, se me había ocurrido la posibilidad de que la madre biológica responda. <br />Así es que en estos últimos días convergieron en mi mente estos asuntos más otro que va ya en un nivel de inquietud que se profundiza: ¿Por qué las madres y padres que entregaron en adopción no se expresan? ¿Por qué no se dejan ver? ¿Por qué es tan difícil lograr esto? Y son estas preguntas que gravitan siempre, mucho más aún, desde que veo que en la web por caso, las búsquedas que abundan son de hermanos que buscan hermanos/as, o primos, muchas veces a partir de relatos de padres enfermos que no quieren morir sin transmitir el legado de la búsqueda... <br />De hecho, y tan solo como ejemplo, al grupo de Facebook (ver enlace) ¡No se le anima nadie! <br />Está bien, podrán decirme que le falta difusión, lo acepto, pido que me ayuden en eso si pueden, pero lo real y concreto es que en los años que hace que busco mis orígenes, por tierra y por web, solamente un par de veces encontré madres que buscan; una, totalmente consciente que era de que le habían robado su hijo recién nacido de la clínica, y otra…esa única, valiosísima otra que confesaba haber entregado y deseaba reencontrarse…<br />Así es que a falta de la aparición de una madre biológica, de origen, cómo se llame, pero que sea de carne y hueso, ¿qué pasaría si desarrollo, en un nuevo gesto de desesperación de los que me caracteriza, una madre inventada por mi escritura?<br />La verdad, es lo que pienso hacer…Mónica Rodríguezhttp://www.blogger.com/profile/10772782360910916648noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7143548671944495100.post-52501474065117547762009-12-15T00:03:00.006-03:002009-12-16T09:24:28.220-03:00Como salida de una galeraAhora que descubrí la manera de guardar archivos en un " site", puedo compartir en este blog un montón de cosas que tenía archivadas y que hacen a este trabajo de búsqueda y elaboración, elaboración y búsqueda...<br />Recientemente, aquella nota del diario El Día ,que es una suerte de síntesis de los caminos recorridos, y en esta entrada, el enlace de acceso al texto del monólogo que escribí hace ya varios años: " Como salida de una galera", que fuera seleccionado y actuado en el ciclo de teatro por la identidad 2006.<br />Gracias a esta selección, a lo largo de las cuatro funciones en que consistió la presentación del ciclo en noviembre de 2006, se produjo el extraño " fenómeno" de que nuestra problemática de cercenamiento del derecho a la identidad, compartiera cartel con aquellas otras, más difundidas , como lo es por ejemplo, el tema de la apropiación de hijos de desaparecidos en los años de la dictadura militar.<br />Es que según parece, la historia de nuestro país marca que el mismo tema, que tanto ha colaborado a crear conciencia del derecho del que hemos sido privados,actúa también como encapsulante de la diversidad de aristas de una problemática que no es unívoca.<br />Por eso, lo que me animó a presentar el monólogo a concurso fue una frase bien clara que leí en las bases: " ...Podrán presentarse textos teatrales que aborden la temática de la identidad en sentido amplio..."<br />Y que otra cosa puede decirse de nuestro tema sino que es "bien amplio" como temática interminable que abarca lo ancho y lo largo del país...<br />Si lo desean, el texto del monólogo puede leerse en:<a href="http://sites.google.com/site/asuntosdeadoptados/home/archivos-del-blog-asuntosdeadoptados-1">http://sites.google.com/site/asuntosdeadoptados/home/archivos-del-blog-asuntosdeadoptados-1</a>Mónica Rodríguezhttp://www.blogger.com/profile/10772782360910916648noreply@blogger.com2